El título hace referencia a esos maravillosos tonos que encontramos cuando el sol se esconde y queda iluminado el cielo con sus últimos rayos de luz creando tonalidades cálidas con colores amarillos, naranjas, magentas… para pasar finalmente a la oscuridad de la noche.
Solo ante las estrellas te sientes insignificante y a la vez estás relajado en una paz oscura, la cual solo se rompe cuando iluminas el motivo a fotografiar como si fueran las pinceladas de un pintor y su obra.